CLAMANDO UNIDOS
La oración es una herramienta fundamental en la vida del creyente y es lo que nos mantiene en comunión con Dios. La oración nos lleva a enamorarnos más del ser o de la persona de Dios, es la forma de tener un acercamiento en intimidad para disfrutar de Su presencia. Además la oración es una respuesta de nuestra persona hacia Dios, Su Espíritu Santo nos cautiva y nos impulsa a orar y buscar más de Su presencia. Cuando uno está en esos momentos especiales de comunión, suele pasar que Dios nos deja caer una carga en el corazón para orar, y esto nos permite correr con ventaja, ya que oramos la voluntad de Dios.
La oración congregacional tiene un lugar importante en cada tiempo que compartimos como familia cada fin de semana en cada congregación. La oración unida activa el poder sobrenatural de Dios y nos sumerge en una atmósfera de milagros. Las cosas comienzan a cambiar, comienzan a producirse cuando hay una iglesia que busca a Dios en unidad. Como iglesia de Cristo en Argentina, tenemos la llave para que Dios abra los cielos y bendiga nuestra amada Nación.
En el año 2001, en medio de la crisis que vivió nuestro país, comenzamos con una sencilla reunión para ministrar y alentar a algunos pastores que estaban sufriendo en sus congregaciones los efectos de la crisis. En un par de semanas, se unieron a ese grupo otros pastores de diferentes denominaciones e iglesias. En cuestión de pocas semanas más, Dios atrajo a muchos consiervos a interceder por nuestro país. Fue así que nació este movimiento que luego denominamos Argentina Oramos por Vos, y años más tarde Dios nos impulsó a transmitir este deseo de orar e interceder en unidad junto a todas las congregaciones del país, alcanzando en los últimos años a cientos de miles de intercesores en lo que denominamos los 40 Días de Ayuno, Oración y Renovación Personal.
Hay un tremendo impacto espiritual cuando nos ponemos de acuerdo, dejamos de lado toda diferencia y buscamos la llenura del Espiritu Santo en unanimidad. La oración unida es la que abre los cielos sobre una nación entera y hace retroceder el poder de las tinieblas.
En todos los años de campaña que hemos llevado adelante desde Argentina Oramos por Vos, hemos recibido cientos de testimonios maravillosos. Liberaciones, sanidades, reconciliaciones, son algunas evidencias del mover de Dios.
Este profundo tiempo de intercesión unida y búsqueda de Dios genera en primer lugar un impacto en la Nación. Este movimiento de oración unida revela la maduración de la iglesia en Argentina.
En segundo lugar, los 40 Días de Ayuno causan un impacto en cada congregación, permitiendo que cada iglesia local entre en un proceso de profunda espiritualidad. La oración fortalece y santifica a cada congregación y se transforma en la llave para una nueva dimensión de milagros.
Finalmente el impacto alcanza la vida de cada creyente, en donde cada persona se transforma en protagonista al hacer de los 40 Días de Ayuno una herramienta para el entrenamiento espiritual y hacer que lo sobrenatural sea algo cotidiano.
Sabemos que en medio de este tiempo el Señor se moverá poderosamente y que usará el marco de esta pandemia mundial para que su Iglesia se levante y sea luz hasta lo último de la tierra.